En El Tiempo y la Eternidad Ananda Comaraswamy reanuda, desarrolla y recapitula consideraciones fundamentales ya expuestas en trabajos anteriores. Muestra, sobre todo, el acuerdo unánime de las diversas doctrinas tradicionales en la cuestión de las relaciones entre el tiempo y la eternidad. Para ello, se ayuda de numerosas referencias extraídas de las doctrinas hindú, budista, griega, islámica y cristiana.Coomaraswamy que gozó de un inmenso prestigio entre los orientalistas occidentales, consideraba su propia obra como una simple "preparación intelectual" a un camino espiritual, y no como un fin en sí misma. René Guenón, con quien Coomaraswamy colaboró durante años, ha dicho de esta obra, resumiéndola, que en el tiempo las cosas se desplazan, aparecen, cambian y desaparecen, mientras que en la eternidad todo permanece misteriosamente renovado .El Tiempo y la Eternidad es, en fin, un documento de lectura imprescindible para todos los que han comprendido el sentido y el alcance de la Sabiduría perenne.