Mal de Ojo, envidia, conjuros, hechizos... Quien sabe cuántas cosas pueden amenazar su tranquilidad y conspirar contra su destino. Las energías negativas que nos pueden dañar no se manifiestan solo a través de ataques con hechizos o maldiciones, están presentes también en actitudes, comportamientos, sentimientos, que son otras formas de energía. Una persona puede dañarnos mediante maleficios concretos, pero también mediante la energía de los sentimientos negativos que proyecte. Tanto en uno u otro caso, el problema es que no nos enteramos que nos atacan hasta que aparecen las primeras consecuencias. Por ello es que la humanidad, desde sus más lejanos orígenes, supo desarrollar modos de protección energética en forma de amuletos y talismanes -que no siempre son objetos concretos, sino también formulas y escudos psíquicos, entre otros- para alejar la negatividad que pretende desviar el sesgo positivo que todos queremos que reine en nuestras vidas. En este libro el lector hallara decenas de alternativas para alcanzar ese preciado objetivo y protegerse contra todo mal.